Inteligencia artificial y el rol del asesor jurídico moderno: impulsando la innovación y mitigando riesgos

La inteligencia artificial revoluciona las asesorías jurídicas
El auge de la inteligencia artificial (IA) no solo está transformando la manera en la que empresas y consumidores interactúan con la tecnología, sino que también está redefiniendo profesiones tradicionalmente conservadoras, como el área legal. De acuerdo con FTI Consulting, la figura del General Counsel (GC) o asesor jurídico general está en el centro de esta revolución, enfrentándose al doble reto de impulsar la innovación en sus empresas y, al mismo tiempo, mitigar los riesgos que presenta la adopción de nuevas tecnologías.
Transformación en la función del General Counsel
Tradicionalmente, el GC ha sido la voz de la razón legal dentro de la empresa, encargado de interpretar y aplicar la ley para proteger los intereses organizacionales. Sin embargo, la llegada de la IA ha ampliado su espectro de acción. Ahora, además de cumplir una función regulatoria y de cumplimiento, los asesores jurídicos se ven impulsados a participar activamente en la estrategia de innovación, ayudando a sus compañías a navegar por aguas desconocidas.
Las nuevas herramientas de inteligencia artificial, como sistemas de búsqueda legales avanzados, softwares de revisión de documentos y plataformas de análisis predictivo, están permitiendo a los equipos jurídicos trabajar con mayor precisión y eficacia. Esto ahorra tiempo y recursos, pero también implica una serie de retos éticos y legales, especialmente en lo que respecta a la privacidad de datos y la transparencia algorítmica.
Innovación bajo vigilancia
El asesor jurídico moderno debe comprender no solo las oportunidades que ofrece la IA, sino también sus riesgos. Entre los principales desafíos destacan:
- La privacidad y protección de datos personales, especialmente ante regulaciones cada vez más estrictas como el GDPR en Europa y sus equivalentes en otros territorios.
- La responsabilidad ante errores de sistemas automáticos, pues depender de inteligencia artificial para recomendaciones legales puede conllevar sesgos o fallos impredecibles.
- La necesidad de transparencia, garantizando que los procesos automatizados son explicables y cumplan con los estándares éticos y legales de la empresa.
Por ello, el General Counsel debe colaborar de cerca con departamentos de TI y ética para crear marcos de gobernanza de la IA, que ayuden a detectar y prevenir los riesgos antes de que se materialicen.
Impulsando la innovación responsable
Asumir un rol activo en innovación también significa liderar con el ejemplo en cuanto a adopción ética de nuevas tecnologías. Los asesores generales pueden aprovechar la IA para agilizar la gestión de riesgos, mejorar la toma de decisiones legales y anticipar conflictos antes de que surjan. Pero deben hacerlo bajo una premisa clave: la innovación solo es válida si contribuye al crecimiento sostenible y responsable de la organización.
La capacitación constante, la actualización en materia de derecho tecnológico y la comunicación transversal dentro de las empresas son más importantes que nunca. Así, los asesores jurídicos pueden cumplir su rol fundamental como catalizadores del cambio, guiando a las compañías hacia procesos más inteligentes y eficientes, pero sin perder de vista la seguridad jurídica y la responsabilidad social.
El futuro de la inteligencia artificial en el sector legal
La IA llegó para quedarse y su evolución será cada vez más acelerada. Si las áreas legales desean mantener su relevancia y aportar verdadero valor estratégico, deben abrazar la tecnología —sin dejar de lado la ética y la prevención de riesgos. El equilibrio entre innovación y mitigación de riesgos será la clave del éxito para los General Counsel del futuro.
Y tú, ¿estás preparado para aprovechar el potencial de la inteligencia artificial en tu práctica legal, sin descuidar la ética y la seguridad? Comparte tu opinión y reflexiona sobre cómo puede impactar la IA en el futuro del asesoramiento jurídico.